El Hablador Periódico de Sopó
Desde hace algunas semanas es común escuchar a los habitantes de Sopó hablar sobre el famoso tema de la limpieza social; de manera más concreta, la existencia de un «panfleto» que amenaza con ajusticiar a todas aquellas personas que tengan comportamientos que afecten las buenas costumbres de la sociedad.
El documento al cual hacemos referencia es claro en su amenaza, y tiene como principal objetivo «atacar la violencia con más VIOLENCIA». Aunque en Sopó dicho panfleto no ha pasado de ser más que un rumor, lo cierto es que ha generado una gran preocupación entre los habitantes del pueblo, debido a lo fuerte y explícito de su contenido.
Motivados por la curiosidad y la angustia de muchas personas, que aparte del comunicado, creen en la existencia de una lista que contiene los nombres de las personas que estarían en la mira de la organización promotora de la limpieza “social”, decidimos indagar acerca del tema con el concejal Oscar Rojas.
Según él, el primer panfleto del cual se tuvo conocimiento en el municipio, apareció en una casa en la vereda Bella Vista. Junto con los concejales Fabio Pinzón, Luis Eduardo Vélez y Yeison Rozo, se realizó la denuncia ante la Personería municipal, la cual levantó un acta que consigna la presentación de dicha denuncia y se acuerda tomar, junto con la policía, las medidas necesarias en el asunto.
Pese a que solo se conoce un panfleto, los rumores atemorizaron a la población; hasta llegar al punto de cohibirse al salir de sus casas a altas horas de la noche.
Con respecto a la lista que circulaba junto con el panfleto, el concejal Rojas dijo al El Hablador que se había logrado desvirtuar la veracidad de su contenido, en un actividad del salón comunal en la vereda Pueblo Viejo, en donde un grupo de madres, preocupadas porque sus hijos estaban «en lista», reclamaron la protección de los concejales.
En el momento de conocer y analizar dicha lista, concluyeron que se trataba de una broma pesada de algunos estudiantes de uno de los colegios del municipio.
No se puede ocultar que la limpieza social es un fenómeno que afecta a la comunidad, y que se viene realizando desde hace mucho tiempo en algunas zonas del país. Es un tema de conocimiento público, donde las acciones para enfrentarla son restringidas por el temor a las consecuencias que su denuncia pueda generar.
Este tipo de prácticas deberían ser consideradas como intolerables en una sociedad civilizada, ya que problemas como: la droga, la prostitución, el vandalismo, entre otros, se deben tratar desde la raíz, es decir, se tienen que enfrentar con planes de educación que brinden oportunidades a toda la población.
Siendo esta la opción más “coherente” para edificar un país que tenga y promueva los valores sociales, resulta inconcebible la «eliminación» de individuos, que al fin y al cabo son el resultado de una sociedad y un estado invadidos de ignorancia, corrupción y falta de oportunidades sociales.
Hay otras opciones más sabias y equilibradas que permitirían prevenir y solucionar ese tipo de problemática, afirmando una de las máximas del líder pacifista Mahatma Gandhi: » La paz no es el silencio que queda después de la guerra, sino lo que impide iniciarla»