Luego de más de 40 años de lucha, la máxima autoridad de tierras del país convirtió en propietarias de sus tierras a 316 familias muisca con la constitución de su resguardo, lo que les garantiza a los miembros de esta comunidad su derecho fundamental de acceso al territorio.
En lo más alto del centro espiritual del Resguardo Indígena, más de 200 muiscas del municipio aledaño a Bogotá realizaron un ritual de agradecimiento a la madre tierra, para celebrar la decisión con la que se verán beneficiadas más de 1.036 personas, que, en adelante, y por decisión propia, protegerán 372 hectáreas del territorio cundinamarqués.
La subdirectora de Asuntos Étnicos de la Agencia Nacional de Tierras, Lizbeth Bastidas Jacanamijoy, catalogó este jueves 19 de abril como un “día histórico” y aseguró que con esta determinación la máxima autoridad de tierras del país “reivindica los derechos de este pueblo y avanza en su compromiso de garantizar el acceso al territorio a las comunidades étnicas”.
Por su parte, el gobernador Muisca de Cota, Gregorio Chingaté, aseguró que este reconocimiento “representa la verdadera paz y termina con la incertidumbre y preocupación de la comunidad por posibles desplazamientos de familias muiscas a otros municipios o ciudades por falta de oportunidades”.
Con la constitución del Resguardo Indígena Muisca se cumple con lo dispuesto por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, que ordenó a la Agencia Nacional de Tierras adelantar los trámites necesarios para la constitución del resguardo, orden impartida hace ocho años por el Circuito Judicial de Facatativá.
Prensa Agencia Nacional de Tierras