Foto: Prensa Gobernación de Cundinamarca
El pasado 2 de abril la Gobernación de Cundinamarca llevó a cabo un encuentro en el cual participaron 114 municipios, la reunión tenía como objetivo estructurar la primera Política Pública de Gestión del Riesgo. Jaime Alberto Sánchez, Coordinación de enlace de Gestión del Riesgo en el municipio de Sopó, manifiesta que esta política busca beneficiar principalmente a la comunidad implementando los siguientes tres puntos:
- Articular las alcaldías, autoridades civiles y organismos de socorro a nivel departamental generando un sistema nacional de gestión del riesgo.
- Estandarizar formatos, lenguajes y procesos, que permitan realizar un seguimiento a largo plazo, esta política está enmarcada hasta el 2036, lo cual obligará a los gobiernos que van llegando a darle continuidad a los procesos y a esas políticas como están plasmadas.
- Se prioriza la labor de las juntas de acción comunal, ya que es desde ahí donde inicia la gestión del riesgo, desde el control, la protección al medio ambiente, y la planeación asertiva para que se desarrollen las comunidades de una manera organizada, conscientes de las amenazas y de lo que pueden hacer en su territorio.
Adicionalmente, se hablaron de los riesgos que se tienen a nivel departamental como municipal, encontrando principalmente amenazas naturales, como deslizamientos, incendios forestales e inundaciones. Cundinamarca a pesar de ser el departamento con mayor número de municipios que controlar está realizando trabajos muy oportunos, brindando políticas de atención asertiva. Asegura Sánchez.
Por otro lado en el municipio de Sopó, se están adelantando estudios técnicos, ya que a la fecha se cuenta con un plan municipal de gestión del riesgo enfocado en el conocimiento básico que se tiene sobre el territorio, pero faltan esos estudios que determinan las zonas de riesgo alto, medio, bajo, mitigable, o no mitigable, dependiendo de la condición de amenaza que se esté presentando.