Después de un periodo de lluvias en el territorio, en el que los volúmenes fueron bajos con respecto a lo habitual para la época, inicia la temporada seca y con ella aumenta el riesgo de que en algunos municipios, especialmente los ubicados en la cuenca baja del río Bogotá y la cuenca del río Suárez, haya desabastecimiento hídrico, por lo que la autoridad ambiental hace un especial llamado a los habitantes de estas zonas, para que sean racionales con el consumo del líquido, pues son poblaciones que carecen de embalses, y ante la disminución de las precipitaciones las fuentes hídricas bajan su nivel y no hay forma de regularlas.
De otra parte, además de la disminución de las lluvias, el aumento de la radiación solar por la baja nubosidad y el aumento de la temperatura, hacen que la vegetación esté más seca, situación que a su vez facilita la propagación de incendios forestales. En este caso, la CAR recuerda el mensaje de prevención, evitando quemas y dando aviso a los bomberos municipales o ante la misma Corporación, sobre cualquier situación irregular y comportamientos inadecuados que puedan desencadenar una conflagración.
El ingeniero Rafael Robles, coordinador de Gestión del Riesgo de la CAR Cundinamarca, resaltó el “llamado la comunidad y a las administraciones municipales para que no realicen actividades que puedan desencadenar un incendio forestal. En caso de percibir alguna columna de humo, deben informar inmediatamente a autoridades ambientales».
Se prevé que la temporada seca se extienda hasta el próximo mes de marzo, y especialmente en diciembre y enero es cuando se percibe el mayor aumento de la radiación solar.
Tomado de la CAR Cundinamarca