Sueño de artesanos, hecho realidad


Interior de la Plaza de los Artesanos abierta hace pocos días

Con entusiasmo, por parte de la Administración municipal y del mío, como representante de los artesanos del municipio, en días pasados se firmó un contrato de comodato entre el municipio de Sopó y  la Asociación de Artesanos de Sopó ARTESOPO.  Un contrato por medio del cual el municipio entrega a ARTESOPO la Plaza de Artesanos para “ el funcionamiento de puestos de exhibición y venta de productos artesanales de los asociados a ARTESOPO, para realizar talleres, charlas, conferencias, entre otras,  relacionadas con la artesanía  y el arte”.

Por fin, después de muchos años, un sueño se hace realidad: contar con un espacio idóneo para la artesanía soposeña:  La Plaza de Artesanos. Un  lugar  donde nuestra comunidad, nuestros vecinos y  los turistas que vengan desde cualquier lugar del mundo, podrán apreciar los productos elaborados a mano por las artesanas y artesanos  residentes en este municipio.

Son objetos artesanales, que aunque son hechos con unas herramientas mínimas y  una maquinaria básica,  reflejan  un gran  talento y creatividad a  través de la utilización de una gran variedad de técnicas  como el tejido, el macrame, el bordado, la marroquinería, la cerámica,  la bisutería,  y la talla en madera, principalmente.

Las obras de arte también estarán presentes: cuadros pintados al óleo o en acrílico, sobre lienzos que ilustran paisajes y naturalezas muertas, entre otros temas. Habrá una colección permanente e invitaremos a los artistas soposeños a hacer sus exhibiciones individuales o en grupo. Para completar, tendremos en un futuro próximo, una Café. Un ambiente más  para atender a los visitantes,  ofreciéndoles productos de la gastronomía tradicional, como los dulces y postres hechos en nuestro municipio. 


Pero todo no está hecho, tenemos un gran reto: mejorar cada día más la calidad de los productos,  innovar los diseños y estilos, y algo muy importante: adquirir una identidad.  La artesanía de Sopó debe llegar a tener un sello, por así decirlo.  “Un algo” que identifique nuestros productos y los haga diferentes a todos los demás: “hecho en Sopó”. Esa será nuestra mayor  fortaleza.  Así  haremos de la Plaza de Artesanos uno  de los atractivos turísticos más visitados del municipio de Sopó, de Cundinamarca, y porque no decirlo, de Colombia.

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